By: Angel "AngelMaz" Montiel
Hace 20 años, Hellboy llegó a los cines atrayendo inmediatamente nuevas legiones de fans a los comics de Dark Horse Comics. Tres películas después y ahora con un presupuesto más reducido que las anteriores, el gran rojo regresa con una de las historias más simples de la franquicia, pero con un gran misticismo que atrae a aquellos que se atrevan a entrar a sus historias, aun cargando con muchas fallas a lo largo de la cinta.
LA OSCURIDAD TIENE VARIAS FORMAS
La película está basada en la miniserie del mismo nombre, donde Hellboy llega a un pueblo olvidado en las montañas Apalaches a resolver una serie de ataques de brujas a los aldeanos, todas bajo el servicio del “Crooked Man”. Desde el principio hay elementos que cambiaron de la historia original, pero en gran mayoría es idéntico al comic y ese es el primer problema para manejar el ritmo de la historia.
La dirección de Brian Taylor es funcional y abrazar el horror fue una movida interesante para la franquicia, recordando que es una combinación de terror y novela Noir donde es un misterio para desentrañar, pero puede sentirse muy sucia toda la producción para dar sentido a este mundo, el ambiente funciona para esta adaptación que sirve como un suave reinicio a los orígenes que conocemos hasta ahora en el cine.
El guion fue escrito por Mike Mignola, el creador original de Hellboy, Christopher Golden y Brian Taylor, siendo un equipo mucho menor que la película de 2019, el cual falló en reiniciar la franquicia. A nivel cronológico, esta es la primera de las aventuras de Hellboy que vemos en el cine, localizada en 1959 y un protagonista más joven, con muchas dudas y claras inseguridades que carga en la historia.
Jack Kesy entrega un Hellboy encantador con sus intenciones, pero con una personalidad hermética, por lo que es complicado empatizar si no conocías antes al peronaje. Por otra parte, Adeline Rudolph interpreta a Bobbie Jo Song, un personaje original para la historia que sirve de ancla emocional y compañera para Rojo que tiene problemas para aprovecharla en el tercer acto y finalmente Jefferson White interpreta a Tom Ferrell, un lugareño que volvió al pueblo tras la segunda guerra mundial quien se vuelve el protagonista más importante para esta historia y no es queja. Esta es la película más contenida del hombre demonio en el cine y es funcional para atraer el interés en la oscuridad de su mundo.
El propio Crooked Man, un hombre llamado Jeremiah Witkins, interpretado por Martin Bassindale es un villano sólido que se mantiene plano, pero tiene una presencia fuerte como para que sea recordada, por otro lado, la bruja principal Effie Kolb, con Leah McNamara, se roba cada escena que aparece, permitiendo que ambos sean una buena mancuerna para mantener atenta a la audiencia.
Hago un paréntesis aquí porque involucra al protagonista y al antagonista el uso de maquillaje. Ambos son sólidos en general, pero hay claras carencias una vez que prestas atención a las tomas, destacando el bajo presupuesto que tuvo la película, pero lo aplaudo al entender que Hellboy y sus villanos deben sentirse reales, aunque lo logren parcialmente.
La historia está dividida en tres actos los cuales marcan el ritmo y las adversidades a enfrentar, sin embargo, es el tercer acto el que se siente inconsistente y quizás le haya funcionado un poco más extender el tiempo de la película, la cual dura 99 minutos, pero siento que este es parte problema de la obra original el cual no es un clímax que pueda ser emocionante para el cine, pero es lo suficientemente conclusivo para poder cerrar la película a pesar de que se descarrila un poco a la lógica de su mundo.
Otros problemas de la película son el manejo del CGI y los diálogos, no indagaré más en la falta de presupuesto, pero lo usan de forma que podría considerarse artística y restringido para compensar las carencias de la producción algo que es acierto o error sin puntos medios. Mientras que las conversaciones de los personajes se sienten raras en muchas situaciones o totalmente fuera de lugar cuando e trata de tratar de conectar un chiste.
CONCLUSIÓN
Hellboy: The Crooked Man es una película simple y entretenida que está siendo honesta con lo que tiene y hace con lo que tiene. Tiene bastantes carencias a nivel visual y narrativo que las saben aprovechar para la historia y sus personajes, entregando un capítulo interesante en concepto pero que falla en conectar por completo. Aun así, es una película que sirve para explorar una faceta intentada traer antes, pero que no han plasmado adecuadamente en estos dos últimos intentos, seré generoso porque disfruté la propuesta, pero para los críticos esta es una película que puede pasar desapercibida.
CALIFICACIÓN: 6/10
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